Piano player, Beata Biegajło
Es difícil relatar la historia de un músico. Vidas complejas, rebosantes de emociones desando ser impresas en una partitura. Sentimientos prohibidos, felices y amargos, que nos llegan a través de las notas de un piano, de un violín, de un arpa, de un clarinete…
Pero
esta es la historia de un músico muy especial, es la historia de MI MÚSICO, el
hombre que llena mi vida con una melodía muy especial: la del amor.
Mi
músico es pianista. Todos los días se enfrenta a si mismo a través de un elegante
piano de pared. Se desnuda, aunque con vergüenza, para mostrar la esencia de su
vida, para sentirse libre, para hablar con el universo… Y el universo le
escucha.
Pasea sus dedos por la superficie de un teclado que se convierte en su vehículo, en su modo de expresión, en su alma.
Recorre partituras, conversa con las teclas, oye con el espíritu…
Él aún no lo sabe, pero es un GRAN PIANISTA, porque mi músico crea música, la da vida, la despierta y la moldea.
Y yo me siento feliz de poder compartir su melodía, de darle la mano para caminar juntos a través de este viaje, de ser su compañera, su amiga y su amante.
Me siento orgullosa de sus logros, alegre de su alegría y triste de su tristeza; porque la historia de mi músico es también mi historia, y las estrellas, que son los ojos del universo, nos contemplan juntos, como una única nota, como una única melodía.
Pasea sus dedos por la superficie de un teclado que se convierte en su vehículo, en su modo de expresión, en su alma.
Recorre partituras, conversa con las teclas, oye con el espíritu…
Él aún no lo sabe, pero es un GRAN PIANISTA, porque mi músico crea música, la da vida, la despierta y la moldea.
Y yo me siento feliz de poder compartir su melodía, de darle la mano para caminar juntos a través de este viaje, de ser su compañera, su amiga y su amante.
Me siento orgullosa de sus logros, alegre de su alegría y triste de su tristeza; porque la historia de mi músico es también mi historia, y las estrellas, que son los ojos del universo, nos contemplan juntos, como una única nota, como una única melodía.
5 comentarios:
Dedico este pequeño relato a "Mi músico", en el día de su cumpleaños.
Hola Silvia, ya veo que tienes un
músico, tu músico, fenomenal y que
vaya desarrollando las notas que
con esa sinceridad, amor y pasión
te sientas feliz escuchando a su
lado. Es un placer saludarte amiga
silvia, ya hacía tiempo que no lo
haciamos.
Un abrazo y un beso
Ángeel-Isidro.
http://elblogdeunpoeta.blogspot.com
Silvia,tu músico estará contento y orgulloso de su escritora,que sabe dibujar su alma como nadie...El universo os mira y os bendice,sabe que cada uno tocáis el espíritu con letras y notas,que elevan el sentimiento y lo hacen más humano y más divino...
Felicidades para los dos y mi abrazo inmenso para ambos.
Mucha suerte y sed felices,amigos.
M.Jesús
Un binomio perfecto: El músico y la escritora.
Un relato romántico y bello. Me gustó mucho la verdad.
Felicitaciones querida Silvia.
Besiños.
Hola Silvia, hace mucho tiempo que no nos veos, yo siempre sin tiempo. Discúlpame.
Me ha encantado tu músico, ese que recorre el alma de las notas, dando vida a cada una de ellas.Te entiendo, yo soy compositora de música sacra y entiendo el lenguaje,por así decirlo de su alma en mí.
Con ternura
Sor.Cecilia
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